En un tiempo futuro...
Allegra Geller(Jeniffer Jason Leigh) es la diseñadora de un sistema de juegos que necesita de un implante en la columna para ser usado. Gracias a la colocación del puerto físico, la sensación de realidad alterna es total.
Durante la presentación de una versión nueva del sistema, y del juego "Existenz", un cazarecompensas(la creadora es un peligro para la competencia y mentes radicales) atenta contra la vida de la programadora. Por fortuna, sobrevive, aunque es herida por el disparo de una arma indetectable por los sistemas de seguridad. Auxiliada por un asistente a la presentación, Ted Pikul (Jude Law), salen del lugar del atentado.
Durante la huida, mientras el joven extrae la bala de la víctima, descubren con horror que esta es: ¡un diente humano!
Las sorpresas no acaban ahí, al descubrir la Allegra que su protector carece de un puerto de conexión para juegos. En una sociedad donde hasta por los bosques vagan pequeñas quimeras genéticas, Ted es un bicho raro.
Después de hallar un refugio, Allegra Geller muestra a su acompañante el nuevo modelo de "consola". Esta es realidad un producto genético, y por lo tanto un ser vivo. Siendo el único modelo del nuevo prototipo, su valor es incalculable, y la simple idea de que enferme constituye un riesgo intolerable.
La diseñadora de juegos convence a su compañero de aventuras de la necesidad de que se coloque un puerto. El implante lo encuentran en un "taller-gasolinera", donde un supuesto devoto de los juegos de A. Geller, Gas(Willem Dafoe), se presta a implantarle un puerto ilegal.
Nada más terminar la operación, el supuesto admirador intenta acabar con la vida de la mujer. Y no porque su admiración no sea sincera(de hecho, confiesa que uno de sus juegos ha cambiado su vida), !sino porque la recompensa que se ofrece por su cadáver es irresistible!
Para bien de ambos, la pelea que se desata a continuación acaba con la muerte de Gas, pero hiere a la "consola". Buscando ayuda se dirigen al laboratorio de un ingeniero amigo, Kiri Vinokur (Ian Holm), el cual consigue salvar la vida del dispositivo.
Durante la intervención vemos con más o menos claridad el interior del "bicho-consola" y conocemos datos de las especies de las que se extraen sus "componentes", etc. Este es un detalle que aporta fuerza a la historia (con independencia de que el aparato sea repulsivo, por cierto. Aunque supongo que es cuestión de gustos) y que ofrece reflexiones a las que, por no ser nuevas, dedicaré un pequeño comentario. Haré una pequeña reseña a continuación, que se pueden saltar tranquilamente, hasta llegar a la etiqueta "Continuación de la trama":
Paréntesis-Comentario personal: "La vida propia de los objetos inertes"(para soslayarlo, avancen hasta el punto "Continuación de la trama")
---------------------------------------------------------------------------------------------
Los objetos inertes vivos.
Estos son nuestros coches, teléfonos móviles, ordenadores y restantes dispositivos mecánicos.
No es una idea que conlleve necesariamente una adicción, u otro desorden mental pero sí, en ciertas estructuras sociales avanzadas tecnológicamente, una dependencia que, como ocurre con muchos otros elementos que "moran" en nuestra cotidianeidad, pueden sumir en un abismo a una mente en desequilibrio, en caso de presentarse su "ausencia".
Lo que hace genial la idea (habitual en la filmografía "cronenbergriana") de que un aparato forme parte de la "Vida"(sin fisuras en la definición) y en este caso a la propuesta de una "consola" de juego viva, es que se parte de una realidad: Los seres humanos, e incluso otras especies animales (como las perras en celo, al adoptar y cuidar un objeto como si fuera un cría real), "insuflamos" de vida a nuestras pertenencias más queridas. Los niños, por ejemplo, sienten como "vivos" a sus juguetes. Sobre todo si, en las primeras etapas, son réplicas de personas o animales. Estos juguetes juegan incluso el rol de psicólogos involuntarios, con gran capacidad para empatizar con su dueño y llenarse de "transferencias" y "contratransferencias". Así, "enferman", "tienen miedo", "no pueden dormir"...
De mayores, mientras nos reímos de estas "infantilidades", la pérdida de nuestro viejo coche, e incluso decidirse a tirar una camiseta que ya apenas merece ese nombre(pero de los cuales nos hemos encariñado, casi "enamorado"), suponen un motivo de duelo real.
Otros ejemplos, igual de crueles, son la "muerte súbita" del televisor y, en estos días, del ordenador y del móvil (paradójico ejemplo, en una planeta el que sabemos más de nuestro "MP4" que de nuestro vecino de al lado, en quien sólo pensamos cuando se muere a solas y tiene el mal gusto de descomponerse y afectar a nuestra nariz) Todos los casos citados son un ejemplo de apego desmedido(que nos lleva a comprender con más facilidad conductas detestables y violentas con nuestro semejantes, de los cuales no admitimos un deseo de separación cuando llega, sin tener que asesinarlos, acosarlos y demás inmadureces conocidas)...En fin, que personalmente, creo que de todos los artilugios conocidos(exceptuando marcapasos y otros dispositivos médicos), el que realmente tiene razones para generar un motivo de angustia es ¡LA NEVERA!¡SIN LOS REFRIGERADORES (DE TODO TIPO), LA SOCIEDAD MODERNA SE COLAPSA!
Y de lo anterior llegamos a la era de Internet. La red de redes ya no es una utilidad. Es una necesidad, como la red eléctrica, los satélites...) Esta, no sólo nos conecta a amigos y desconocidos con los que compartir negocios e intereses comunes. El ferrocarril electrónico nos permite incluso viajar cada vez más a lugares impensables hace años, y salir de nuestra vida rutinaria para convertirnos en bravos guerreros, deportistas de élite... No creo que haga falta detallar más. "Matrix" ya está aquí, aunque todavía tengamos la opción de no ser una simple "pila". Pero sí que parecemos estar a un paso de convertirnos en unos "binarios" de "Star Trek". Por todo lo dicho, me reafirmo en la genialidad de la "máquina viva" de "Existenz". O quizás nos en una genialidad de idea, sino un concepto indispensable para un guión tan "potente".
Continuación de la trama
--------------------------
Volviendo a la película, y abreviando para no cansar, nuestros protagonistas prueban el juego. Al entrar en él se verán inmersos en una especie de guerra paralela a la real(o externa) donde una organización contraria a tales sistemas operativos (una especie de ecologistas radicales) intentan sabotear los proyectos de Allegra Geller. Irónicamente, para conseguirlo deberán aceptar llevar implantes, etc., y actuar casi corporativamente, de modo que más parece una empresa rival que terroristas.
Al final del filme se llega a través de una serie de interesantes vericuetos que termina con el final del programa en curso. Pues al fin todo consistía en eso: en que lo visto y vivido era parte de la presentación informática con la que arranca la película....¿O no?...Porque "afuera" espera un nuevo y sorprendente ataque criminal... Y la pregunta de uno de los encañonados por un arma(esta vez convencional), que sonriendo pregunta algo así como:
-¡Espera!¿Aún estamos en el programa?
El desenlace de Cronenberg por antonomasia: la locura.
Comentario
------------
"Existenz" es como cuando el poeta de un conocido cuento chino soñó que era una mariposa, y al despertar se cuestionó si era él quien había soñado, o era la mariposa. O como el mendigo protagonista de uno de los relatos de "Los Cuentos de las Mil y una Noches", que por antojo de un gobernador pasó, tras ser sedado a despertarse ocupando el puesto de éste para, al día siguiente despertarse de nuevo en un callejón, abocado a la demencia por no saber discernir qué era real o no. Una historia que nos recuerda también a la salida y entrada en el calabozo del príncipe Segismundo de la obra de Calderón de la Barca: "La Vida es Sueño". Aunque supongo que todos hemos despertado alguna vez con una sensación similar. Yo mismo recuerdo un "duermevelas" que, de bachiller me libró de ir a clase ¡porque tenía que robar unos valioso diamantes de una fortaleza nazi!. Aunque peor me fue cuando soné que no podía dormir...
Aunque decir únicamente que esto de "Existenz" es poco. Y eso que a mí, entre mi falta de percepción y el cansancio, se me quedarán muchas cosas por analizar.
"Existenz" es, en parte, un renovación de "Videodrome". Esta película (de las mejores del director canadiense) fue un fracaso. Aquí la idea se rescata y remoza. Dos son los cambios fundamentales: Uno, quitar el componente sexual sadomasoquista y la violencia extrema, reduciendo la carga de los elementos eróticos y agresivos a niveles más usuales. Y dos, centrar la temática en los programas lúdicos. Aunque probablemente esta habría sido su opción en el anterior filme, de haber estado ya "en marcha" el mundo de la red y los juegos que hoy conocemos y aceptamos como habituales.
Luego está la reflexión sobre qué es real y qué no. Ya toqué ese punto antes. No obstante, recordar la importancia que tiene en la película, ya que se puede llegar a dudar de quién o qué está vivo o no. Al menos, por parte de los protagonistas. Lo que nos lleva de nuevo a "Matrix", el largometraje de los hermanos Wachowski. Resulta razonable elucubrar que al menos esta película de Cronenberg pudo influenciar en las mentes de estos. Sin que esto signifique un descrédito para la primera película de la ya famosa trilogía, que de hecho es una de las más interesantes de los últimos años.
Finalmente, de nuevo y, aunque sólo sea al final, "el fantasma de la locura"(sello del autor), ronda de nuevo por la trama. Esta vez ante unas circunstancias que no únicamente impiden la clara distinción de una realidad absoluta, sino que frustra la posibilidad de los protagonistas(posibilidad que sí existe en "Matrix") de "saltar" de una realidad a la otra, sin perder la cordura en el intento de "desconexión".
Acaba así, de momento, mis comentarios sobre una parte de la filmografía de David Cronenberg. Hasta su próxima película...
Otros actores y miembros del rodaje en:
Otros enlaces sobre "Existenz", aparte del vinculado al título:
Trailer de la película(en inglés):
eXistenZ (1999) - Trailer
No hay comentarios:
Publicar un comentario