El terror continúa aumentado en la sociedad nipona ( terror que compartimos), a causa del agravamiento de las condiciones de la central nuclear de Fukushima. Se ha ampliado el radio de seguridad y se ha pedido a la población que se mantenga en sus casas. Al mimo tiempo, miles de dosis de yodo están siendo suministradas entre la población, para ayudar al bloqueo de la glándula tiroides, esencial para combatir los efectos de la contaminación nuclear.
Mientras tanto, las valoraciones que se dan a la situación entre Japón y otros países, difieren.
En espera de más noticias, que deseamos esperanzadoras, mandamos nuestro cariño nuevamente al pueblo japonés. En mi corazón todos,aunque hoy me vuelve una y otra vez un nombre que no olvidaremos: Miyagi.
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